Agrónomos advierten riesgos ante cultivo ilegal de maíz transgénico

AgroOrgánico – 14 de mayo de 2025 – Redacción

De acuerdo con expertos egresados de la UAM, la falta de información y los vacíos regulatorios pueden derivar en una contaminación genética irreversible, afectando a cientos de miles de productores que han dedicado décadas a la conservación de semillas criollas.

Por Redacción Agro Orgánico

Ciudad de México. – La Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos Egresados de la Universidad Autónoma Metropolitana (ANIA), advirtió que la apertura a la importación y comercialización, así como el posible cultivo ilegal de maíz transgénico en México, “pondría en grave peligro la biodiversidad genética de los maíces nativos mexicanos, y la seguridad alimentaria del país”.

En un comunicado, señaló que la falta de información y los vacíos regulatorios pueden derivar en una contaminación genética irreversible, afectando a cientos de miles de productores que han dedicado décadas a la conservación de semillas criollas.

“La siembra de maíz transgénico, incluso cuando es ilegal, podría extenderse por negligencia o mala fe de ciertos actores, sobre todo del sector comercial, generando daños irreversibles a nuestras variedades autóctonas; esto representa no solo una amenaza biológica, sino también un atentado contra nuestra cultura, economía rural y soberanía alimentaria”, apuntó el ingeniero Javier Martín del Campo, presidente de ANIA.

Al respecto, la ANIA dijo que, a pesar de la reforma constitucional que prohíbe el cultivo de estos organismos modificados genéticamente, la venta y consumo humano autorizados abren una puerta peligrosa para la expansión descontrolada de estos cultivos.

Asimismo, recordó que el primer caso documentado de contaminación genética por transgénicos en México, se remonta a 2001, cuando investigadores de la Universidad de Berkeley hallaron ADN transgénico en maíces nativos de la Sierra Norte de Oaxaca. Desde entonces, estudios del Instituto Nacional de Ecología (INE) y la Conabio han confirmado la presencia de estos contaminantes en otras regiones como el Valle de Tehuacán.

Con base en lo anterior, la ANIA aseguró que con la reciente autorización para el consumo humano, el riesgo se intensificam ya que si no se establecen controles estrictos, se podría perder la pureza genética de decenas de razas criollas como el maíz morado —rico en antioxidantes— o el maíz zapalote chico, representativo de la cocina oaxaqueña y en la dieta tradicional mexicana.

En este contexto, la asociación propuso una serie de medidas urgentes, como la capacitación técnica a agricultores, la imposición de sanciones claras para quienes siembren transgénicos ilegalmente y el fortalecimiento de programas de monitoreo genético. “Proteger nuestro maíz no es una opción, es una obligación moral, científica y social”, enfatizó Javier Martín del Campo.

Por otra parte, diversas agrupaciones de la Red Maíz —registradas ante el SNICS— denunciaron su exclusión de la convocatoria “Maíz y Frijol” de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (SECIHTI). La falta de inclusión de proyectos con maíces criollos de colores constituye, afirmaron las agrupaciones, una discriminación técnica y cultural.

Por ello, solicitaron al titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), doctor Julio Berdegué Sacristán, intervenir de forma urgente, a fin de ampliar los plazos de la convocatoria y asegurar la participación de todos los productores. “La diversidad genética del maíz, eje de nuestra identidad alimentaria, no puede quedar fuera de la agenda nacional”, afirmó Martín del Campo.